Qué pensaría usted si un día cualquiera recibiera una llamada desde el celular de una persona que está cumpliendo una condena en la cárcel, de seguro pensaría que es una pitanza o lo están estafando, pero ello pudiera ser lo normal en las cárceles del futuro, si de verdad nos creemos aquello de que cuando una persona está presa tiene coartada su libertad, pero no por ello su derecho a comunicarse. Si bien hoy en día en las cárceles está permitido que los reos tengan acceso a televisión, radio y, en algunos penales, existe un teléfono público para efectuar llamadas; sin embargo no les está permitido tener acceso a celulares propios, ni tampoco a la internet. No obstante ello, es frecuente encontrar en los allanamientos equipos móviles escondidos por los reos, que realizan llamadas clandestinas, a pesar de las antenas instaladas por gendarmería para bloquear las señales que, por lo demás, poco y nada funcionan, son casi un gasto inútil, porque cuando son efectivas bloquean has
Crónicas, columnas, semblanzas y otras escrituras ideológicamente falsas