Ya hay varios nombres para presidir la Convención Constitucional, ronda la idea que sea mujer y de regiones; algunos piden que sea mapuche, como símbolo de reconocimiento a dicho pueblo, sin embargo no he escuchado el argumento de que como el mandato de la Convención es a dialogar en torno a los contenidos de nuestra nueva Carta Fundamental, el que sea una lamngen sería lo apropiado, pero por aquello de la "oralitura" que señala el Premio Nacional de Literatura, Elicura Chiuailaf, es decir, “la importancia de la palabra en la cultura mapuche, como sustento de la comunidad y de la comunicación con el espíritu y el corazón del otro”, según lo define la página electrónica Memoria Chilena de la Biblioteca Nacional http://www.memoriachilena.gob.cl/602/w3-article-93536.html . Lo de dialogar sería, entonces, connatural al mapuche, no olvidemos que el imperio español, que en sus dominios nunca se ocultaba el sol, con el único pueblo que estableció tratados y parlamentos fue con
Crónicas, columnas, semblanzas y otras escrituras ideológicamente falsas