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Mostrando entradas de enero, 2020

Bailar

Bailar es un acto voluntario liberador, no solo divierte sino que favorece la interacción social, se libera dopamina que inunda el cuerpo de una sensación placentera. Con el baile, presente en todas las culturas, se comunica, hay quienes se enamoraron bailando, lo que en ningún caso  podría ocurrir en caso que bailar fuera forzado. Aunque se haya nacido con dos pies izquierdo y, a riesgo de pisar callos, todos más de alguna vez hemos bailado, ya sea un Vals, Bolero, Foxtrot, Charleston, Twist, Disco, Rock, Hip- Hop, Reggae o Reggaeton.  En  los sesenta se bailaba a Go-Go, en los 80 el de los que sobran era furor, incluso hasta hoy, pero también perdura el Corrido mexicano y hace unos años llegó la Cumbia villera. Se baila a cualquier día y hora, por más que Travolta, prefiera de manera febril hacerlo el sábado por la noche; se baila también en el trabajo, como pausa activa.  Si hasta Nosferatu bailaba, claro está que “La Danza de los vampiros”; Elvis movió la pelvis y Michael Jac

Arte en el Paine

Si es cierto aquello de  "Al lugar que fueres, haz lo que vieres",  los turistas que pintaron rocas al interior del Parque Nacional Torres del Paine, podrían argumentar a su favor un error de prohibición, quizás pensaron que pintarrajear en Chile es una práctica autorizada y habitual, cosa de ver cómo están rayadas las esculturas, los monumentos y el patrimonio arquitectónico nacional. Para evitar que se repitan nuevas pintadas, tal como a la entrada de la Octava maravilla del mundo y  reserva de la biosfera por la Unesco, el coipo Forestín informa a los visitantes que no se puede hacer fogatas podría, también, advertir: "Ojo con el arte", para prevenir que ante el  impacto que provoca la majestuosidad del paisaje natural, hay que contener la tentación artística de creerse poco menos que un da Vinci.

"Yo, soy decé"

Por mucho que algunos aventuren que tras las movilizaciones sociales nuestro presidente perdió la brújula y con ello el liderazgo, se volvió un apostata de su programa y ahora pretende gobernar con el del contrario, nada de esto es tan así.  Pasaría que en la solitaria intimidad del mandatario, aconteció una agnición unidireccional, el reconocimiento o revelación   de quien efectivamente se es. La agnición, es un recurso muy usado en la literatura y el cine cuando el personaje se revela acelera un desenlace inesperado y la resolución de un conflicto, un ejemplo paradigmático de la agnición lo encontramos en la película Star Wars episodio V “El imperio contrataca”, cuando Darth Vader, pronuncia la famosa frase “Luke, yo soy tu padre”, pero también se utiliza en política como cuando Luis XIV pronunció: "El Estado soy yo". Cabe mencionar que en su primer gobierno Sebastián Piñera, hizo un primer atisbo de reconocimiento, que se quedó en el intento, al hablar de “cómplices p

La PSU y la tómbola

Vivimos en un mundo raro, lo que ocurre con la PSU fue fatal y ni nos inmutamos, la anomia se volvió normalidad, hubo alumnos a quienes quitaron pruebas de las manos mientras la estaban rindiendo, a todas luces atentatorio contra su dignidad y, lo peor de todo, nadie sabe a ciencia cierta dónde esto acabará. Mis suegros, profesores  normalistas, a principios de este siglo optaron por jubilarse anticipadamente, les era muy difícil hacer clases, notaban que se había perdido el respeto por parte de alumnos y apoderados.  Con  la mala educación demostrada por un pequeño grupo de jóvenes que biocotearon la PSU, para el próximo marzo se duda si dejarán a sus maestros hacer clases. Como algunos piensan que  los niños no son culpables, ni responsables, no viene al caso preguntarse, entonces, qué sentido tiene la Ley de Responsabilidad Penal Adolescente, menos, si se podría permitirles votar. Hace muchos años tuve un amigo historiador, profesor de historia universal en una unive

La paradoja de Adán

Una de las imágenes más elocuentes del despertar de la conciencia humana la entrega Vicente Huidobro en su poema Adán: “Y Adán, como el que despierta de un gran sueño. Atónito miraba el universo”, escribe en uno de sus versos. Estudiantes secundarios conscientes de la crisis social por la que atraviesa el país, anunciaron   su rechazo a rendir la Prueba de Selección Universitaria (PSU), dado que según ellos no están en condiciones emocionales y afectivas para rendirla por la cantidad de compañeros heridos durante las protestas, además de ser una prueba selectiva, discriminadora y provoca un fuerte estrés. Pero el argumento, entendible por cierto, puede ser utilizado por quienes, lisa y llanamente no quieran ser evaluados, ni poner un poco de esfuerzo en el estudio para ingresar a la universidad. Similar argumento utiliza el adicto, que brega por la legalización de la droga con el disfraz de medicamento para todos los males, incluido el mal de ojo. No son nuevas   las críticas a