Notable acierto del candidato Gabriel Boric, durante el último debate presidencial, al dar a conocer los resultados del test de drogas que se realizó el que arrojó negativo a marihuana, cocaína y anfetaminas lo cual demuestra que Gabriel no es un consumidor de drogas, como muchos presumen, sólo porque en ocasiones aparece como desaliñado.
Pero si bien Gabriel, no será volado, no por ello deja de ser
marciano, considerando que en jerga yonki
ochentera se decía “cómo tan marciano” a todo aquel tipo que no piteara.
El caso es que tras estas semanas queda la sensación que un “marciano” ganara la segunda vuelta, instaurando la nueva vía chilena al socialismo, porque el sentido común indica que de ganar Kast, es como ir contra natura, validar el actual gobierno que tiene muy poco respaldo ciudadano, por lo que sería una sorpresa mayúscula que el presidente Piñera entregase la banda presidencial al candidato de su sector.
Sin duda que mostrar el test de drogas, fue un acierto mediático, aunque tras el debate el candidato se molestara con el periodista que le preguntó por qué se realizó el test de orina y no el de pelo que cubre una mayor cantidad de tiempo; Gabriel, llorando falsa pobreza, dijo que ese costaba 700 mil pesos. Pero lo que más perturbó a Gabriel fue que le consultaran por la fecha del test, ya que el día que el certificado indica que se tomó la muestra, él debía estar en cuarentena preventiva por Covid. Aquí el enojo de Gabriel, con el chico de la prensa, no fue la actitud propia de un marciano, más bien de un marcianeque.
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