Sobre "La rebelión de los convencionales"

Carlos Peña, acierta en su columna "La rebelión de los convencionales", respecto a que "La declaración que emitió ayer un grupo de convencionales (según la cual no estarían sometidos a reglas preexistentes) contradice de manera flagrante el sentido del proceso político que se convino el año 2019. Y desde luego, es contradictoria con su propia posición institucional".   

Pero no ocurriría lo mismo en su analogía a las reglas fútbol, porque si es cierto, como dice Peña, que según dichas reglas, patear una esfera puede llamarse un gol, ello no es tan así, por cuanto es más bien un "chute"; gol sería que la esfera traspase íntegramente la línea de los tres palos.  

A mayor abundamiento, si todo chute es un gol, en el último partido de Chile versus Bolivia, la roja habría goleado y no empatado en un mísero 1 a 1, con un gol que fue no por un “chute”, sino por un cabezazo. 

La intención oculta tras la declaración de los 34, convencionales, sería, entonces, querer pasar un gol a la normativa vigente, de hecho lo hicieron, falta que el VAR lo legitime y ratifique que van ganando.