“En esta despedida recuerdo algunos momentos estelares de la saga, pero sobre todo a mí viéndola a lo largo del tiempo, desde los inicios compartidos y felices hasta la soledad final.” (Columna “Carrie”. Fernando Savater. 30/05/2020. Diario El País, España)
Los matinales surgieron para entretener
a un público específico, acompañar a dueñas de casa y asesoras del hogar
en sus labores mañaneras.
Su función principal, y la única por lo
demás, no es otra que la más clásica y efectiva de la TV: entretener. Porque
para informarse están los noticieros diarios; ahora, si alguien sufre de
obsesión informativa, tiene a CNN, radio Bío Bío o Emol. Quien crea que
los matinales contribuyan a educar, es menospreciar lo que intentó hacer
Teleduc, aunque un matinal en cierto modo lo logra cuando enseña la más
económica receta de cocina.
Con un formato ya
probado en muchos países, la apuesta en principio fue simple: mezclar música,
moda, humor, astrología y técnicas sencillas de autocuidado, con entrevistas a
personajes del espectáculo, en especial para promocionar teleseries y programas del
propio canal, sin olvidar el cotilleo de opinólogos de peluquería.
El éxito vino de la mano del aumento de
las redes sociales, que sirvieron para la reproducción masiva de los matinales,
algunos políticos vieron en ello una gran oportunidad de resurrección y si
primero se mezclaron en los matinales con los opinólogos de espectáculos, terminaron por desplazar a estos últimos.
La pandemia y el encierro,
sumó nuevos públicos a los matinales, pero trajo también una fuerte
competencia, las series de Netflix, que por lo general eran vistas durante el fin de
semana, pero obligado a estar toda la semana en casa, bien podrían verse a cualquier
hora del día.
Para hacer frente a Netflix los
matinales muestran versatilidad, sufren una sutil transformación, sin perder
por ello su función principal, como saben que la pandemia produce miedo y temor
adecuan su formato a una serie médica, de suspenso dramático o de frentón, de
terror.
Estimado Burgues, el como se enfocan periodisticamente estas situaciones no tendra que ver con la practica del chileno , de ver el vaso medio vacio y no medio lleno
ResponderEliminarLos matinales, por definición, consideran al telespectador un idiota.
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