Alberto y los pieles rojas

Si hay algo que valoro en  Alberto Mayol, es que sea un político impredecible y cada  día nos sorprenda más, por lo que uno nunca acabará de entenderlo, primero hizo campaña para reunir firmas para RD, pero sin firmar por esta orgánica, luego sin que nadie diera un peso por él fue precandidato presidencial, tras lo cual ganó un pugilato discursivo con Giorgio Jackson, aunque a los dos dejó magullados y, ahora, resulta que le apostó su cabellera a Pepe Auth a que saldría electo diputado.

Pero quizá sea tiempo que Mayol intente domar su ímpetu electoral, como corre el riesgo que éste le desconozca no debería, entonces, exponerse tanto, ya que su apuesta es muy  peligrosa, lo obliga a ganar sí o sí en noviembre de lo contrario sus enemigos pieles rojas del izquierdoso FA que él, ingenuamente, creía eran sus amigos- pero como de los indios nunca hay que confiarse nos enseñó hace años el legendario John Wayne en los western hollywoodenses- le cortarán no solo su cabellera sino que también la lengua y le enrostrarán que su soberbia llegó a tanto que buscó perder para despojarle de la novedad al pela´o Jackson. 

Como cierta vez se me ocurrió hacer una apuesta similar que me dejó muy malos recuerdos, la situación me tiene muy preocupado y por el afecto que, sin conocerlo, a Mayol le tengo, intentaré por todos los medios comunicarme con él para sugerirle que en lugar de andar tentando a la diosa fortuna ¿no habrá pensado mejor esperar a que se le caiga solo el pelo, que por las entradas que tiene se ve que será luego?